Vuelan las hojas
bailando un vals;
aire de otoño
lleva el compás.
Bajan del árbol
hacia la tierra
y cuando llegan,
están ya secas.
Se viste el bosque
del amarillo.
Alguien me ha dicho,
bajo, al oído:
"Desnudo el árbol,
ponte tu abrigo".
Luz del Olmo
Hola, de nuevo estoy aquí, no puedo abrir tu blog, y no leer tus cuentos
ResponderEliminarbesos
Kety
Gracias Kety por intentarlo, pero si has dejado el comentario, supongo que es porque has llegado hasta aquí.
ResponderEliminarBesos.